dimanche 14 octobre 2012

En Buenos Aires más de mil personas marchan por los derechos, por las muertes, por las injusticias


Fue masiva la demostración callejera de los pueblos en la principal ciudad de Argentina, los que se autoconvocaron en esta simbólica fecha exigiendo justicia por los hermanos recientemente asesinados y haciendo una fuerte defensa de sus derechos, amenazados por proyectos como la Ley Antiterrorista y el proyecto de reforma al Código Civil.
En Buenos Aires más de mil personas marchan por los derechos, por las muertes, por las injusticias
Texto: Mapuexpress
Foto: Resistencia Qom

El 12 de octubre es una fecha cargada de simbolismos y que, por lo mismo, permite reunirse, encontrarse y hacer balances. Más de mil personas llegaron este año a la convocatoria a marchar en Buenos Aires, buen momento para que las distintas organizaciones indígenas y no indígenas puedan encontrarse en la calle. “Marchamos por las deudas pendientes que tiene el estado nacional con los pueblos indígenas”, dice Benito Espíndola, de Orcopo (Organización de Comunidades de Pueblos Originarios), una de las convocantes a la marcha. “Los 12 de octubre, generalmente vienen todos los hermanos a traer sus denuncias o nos las envían desde las comunidades con las que estamos más en contacto. Sabemos que si bien en el país hubo un reconocimiento de derechos, hay una gran brecha en la materialización de estos. Siguen habiendo desalojos, siguen habiendo muertes”.
Por los derechos, las muertes y la injusticia
Estas tres demandas vuelven a ser las que se ponen en discusión en un 12 de octubre. Las muertes y la injusticia, porque siguen sin ser juzgados los asesinos de Javier Chocobar, muerto por dos balas disparadas por un ex policía que acompañaba a un terrateniente hace tres doces de octubre. Por la muerte de los hermanos del pueblo Qom asesinados el 23 de noviembre de 2010. Por la injusticia de que aún no hayan responsables de la matanza de Ledesma, en Jujuy el año pasado.
Por los derechos, porque pareciera ser que hay un retroceso en lo que tanto costó que fuera escrito y votado. El proyecto de reforma al Código Civil, tristemente defendido por algunas organizaciones cercanas al gobierno de Cristina Fernández, es ahora la principal amenaza, que busca mutilar derechos consagrados en la constitución, como lo es el territorio, que quiere ser reducido a bien inmueble. “Ya hay desalojos y atropello de derechos, no me quiero ni imaginar lo que va a ser cuando esto se reduzca a un derecho privado, de carácter economicista como se quiere hacer con el Código Civil”, dice Benito Espíndola.
Y también se marcha por las leyes que se quieren aplicar, como el proyecto de Ley Antiterrorista. Pero no solo por la de acá, sino por las leyes antiterroristas de todo el continente. Ahí, el recuerdo a los hermanos en huelga de hambre en Chile es permanente. La criminalización sufrida por el pueblo mapuche está siempre presente, late en las palabras, en las canciones, en los gritos de todos los que marchan.
¿Qué viene ahora para el movimiento indígena?
El proyecto nacional y popular de este gobierno choca directamente con las comunidades indígenas. Ese impacto ya se siente en numerosos lugares del territorio y cada vez crece más. Para el gobierno, es prioridad el “ser inteligentes” y el modelo extractivista, aunque esto implique “mover a una comunidad a otro lugar”, como señaló hace dos años la Presidenta. Para las comunidades es prioridad el agua, la vida y el territorio. “Yo creo que en los últimos tiempos ha habido una enorme cooptación de nuestros dirigentes” dice Benito Espíndola. “Por lo menos este anteproyecto de reforma del Código Civil ha puesto en alerta a nuestras comunidades, nos va a permitir separar la paja del trigo: saber quiénes están luchando por nuestros derechos y quien realmente están trabajando para otros”.

1 commentaire:

Camila a dit…

La verdad que me parece perfecto que la gente se manifieste cuando no está de acuerdo. Siempre con respeto, se pueden lograr cosas. Hay mucha gente de Sudamérica que está con los manifestantes y de hecho se supo de varios que participaron desde su lugar en el mundo. Yo justo tenía pasajes a Santiago de Chile desde Buenos Aires y viví todo desde el avión. La linea aerea mostró mucho respeto también e informó a los pasajeros sobre lo que quisiéramos saber. Hubo varios que desde el avión mostraron su diferencia con el gobierno y se los escuchó, muy buena organización y predisposición por parte de las instituciones!